Según datos de la OMS, desde el año 2000 la mortalidad de la malaria ha
descendido un 60% en el mundo, mientras que el sida ha quedado ya en una
enfermedad crónica para los que no consiguen acceso al tratamiento. Por el
contrario, la polución provoca ya casi cinco veces más muertes que estas dos
dolencias juntas. Es lo que se llaman
muertes evitables.
En el periódico El País del 22 de
junio de 2018 se publicó un trabajo que llevaba por título “93.000 personas han
muerto por la polución en diez años”. Ese trabajo empezaba con la siguiente
sentencia de la bióloga Cristina Linares, Investigadora de la Escuela Nacional
de Sanidad, elegida este año para formar parte del Grupo Intergubernamental de
Expertos sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas: “Hay que restringir
el tráfico. No es una propuesta, sino un llamamiento desesperado a la acción”.
A continuación, se presentan los resultados de tres investigaciones que
analizan datos del período 2000-2009, facilitados por el Instituto Nacional de
Estadística y el Ministerio de Medio Ambiente.
1.-Solo el dióxido de nitrógeno ha sido culpable de 6.085 muertes evitables
cada año en España, según uno de los trabajos, publicados en la revista
especializada Environment International .
2. A los 6.085 muertes anuales por dióxido de nitrógeno se suman 499 por
ozono troposférico, según un segundo estudio publicado en Atmospheric environment. El ozono a nivel del suelo -ingrediente de
las nieblas tóxicas características de las megalópolis- se forma por una
reacción con la luz solar de las emisiones de vehículos e industrias. El exceso
de ozono genera problemas respiratorios, como el asma, y puede provocar
enfermedades pulmonares.
3. Un tercer trabajo, publicado el año pasado en la revista especializada Envirionmental Pollution cifró en 2.683
las muertes prematuras anuales debidas a la contaminación por partículas en el
aire, también procedentes de los tubos de escape.
Los estudios citados solo tienen en cuenta la mortalidad a corto plazo,
dejando fuera los casos de cáncer
Julio Díaz, jefe del departamento de Epidemiología de la Escuela Nacional
de Sanidad, «se muestra atónito por la falta de concienciación de las
autoridades y de la sociedad en su conjunto ante el problema de la
contaminación. Este científico propone reforzar el transporte público,
multiplicar los aparcamientos disuasorios en las afueras y evitar que los
coches entren en la ciudad».
¿Cómo ha reaccionado la industria automovilística? De momento, algunas de
esas industrias –recuérdese el caso de Volkswagen- han hecho trampas para
aumentar las emisiones sin que se notase. Y, por otra parte, ocho días después
el mismo periódico en el que se publicó el trabajo anteriormente señalado, iba
acompañado de un cuidadoso folleto de 98 páginas. Pura propaganda para evitar descenso de ganancias económicas.
En mi libro Imaginar y crear el futuro (2ª ed,
Madrid,Bubok, 2017:34), menciono que José Vidal-Beneyto, catedrático de
Sociología, en su columna periodística en El País del 16 de febrero de
2008, después de relatar la propaganda promovida, con gran éxito, por General
Motors, Firestone y Standard Oil para acabar con los tranvías en las ciudades
americanas y sustituir su transporte por autobuses y coches particulares, se
preguntaba: "¿Cómo es posible que un genocidio de tal magnitud haya quedado impune?
Una ventaja de las cuarentenas y del derivado "freno económico" ha sido la mejora significativa de la calidad del aire y la reducción drástica de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Un informe de Carbon Brief ha indicado que entre diciembre y febrero en China se registró una caída del 37% de los niveles de dióxido de nitrógeno, más un descenso del consumo de carbón del 36% y una reducción en la actividad de las refinerias de petróleo. Los satélites de la Agencia Espacial Europea (ESA) revelaron en una semana una caída de dióxido de nitrógeno del 40% en China y reducciones significativas tambien en el norte de Italia, como consecuencia de la paralización económica.
A falta de datos sobre el impacto en Estados Unidos y la Unión Europea, los expertos estiman que este año podría registrarse la primera caída global de emisiones de dióxido de carbono desde la crisis financiera de 2008.
En conclusión. El cambio climático ha conducido a una pérdida de biodiversidad y la pérdida de diversidad a la pandemia del coronavirus. Para hacer frente a esa pandemia se ha hecho uso de las cuarentenas o "confinamiento", que ha provocado un gran descenso de la movilidad y actividad industrial, es decir, de las emisiones de efecto invernadero, origen del cambio climático y causa de contaminación que ha causado la muerte de muchos ciudadanos.
¿No será necesario modificar nuesto modo de vida, ir hacia un modo de vida más humano y sostenible?
No hay comentarios:
Publicar un comentario