He leído una noticia relacionada con varias las metas del Objetivo de Desarrollo Sostenible 3: "garantizar una vida sana y promover el bienestar en todas las edades", que me parece obligatorio copiar.
El cáncer de cuello uterino es uno de los más frecuentes entre las nigerianas, con 12.000 nuevos casos solo en 2020; y es el cuarto más común entre las mujeres de todo el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta enfermedad causó al menos 342.000 muertes en el planeta en 2020. La mayoría de los casos están provocados por el virus del papiloma humano (VPH), la infección vírica más común del aparato reproductor. Mientras que en las mujeres con un sistema inmunitario normal el cáncer de cuello de útero tarda en desarrollarse entre 15 y 20 años, en las que cuentan con un sistema inmunitario debilitado puede tardar de 5 a 10.
Según la OMS, las vacunas contra el VPH son seguras y eficaces para prevenir las infecciones por VPH. Para prevenir el cáncer de cuello de útero, la OMS recomienda vacunar a las niñas de 9 a 14 años, cuando la mayoría de ellas no han iniciado su actividad sexual y es más improbable que hayan estado ya expuestas al virus.
Nigeria es uno de los países que han empezado a vacunar a sus ciudadanos para prevenir los cánceres relacionados con el VPH. El 24 de octubre, el Gobierno anunció la inclusión de esta inmunización en su programa de rutina vacunal, con el objetivo de llegar a 7,7 millones de niñas. De lograrse, este es el número más alto alcanzado en una sola ronda de vacunación contra el VPH en el continente africano como parte de una campaña de inmunización frente al virus que causa casi todos los casos de cáncer de cuello de útero.
En una primera etapa, informa la Alianza Global para las Vacunas (Gavi), 16 de los 36 Estados del país intentarán inmunizar a poco más de 7,1 millones de niñas en tres meses. “Para enero de 2024, la campaña por fases se extenderá por todo el país”, informa el ente en un comunicado. Hasta finales de 2025, Nigeria pretende haber vacunado a 16,6 millones de niñas de entre nueve y 14 años contra el virus de transmisión sexual, responsable de al menos el 70% de los cánceres de cuello de útero, indica Thabani Maphosa, responsable de ejecución de programas de Gavi en el país.
El Ministerio Federal de Sanidad, con el apoyo de Gavi, Unicef y la OMS, entre otros, proporcionará gratuitamente las dosis para los tipos 16 y 18 del VPH. Hasta ahora, la vacuna estaba disponible a través de clínicas privadas por alrededor de 65 dólares la dosis, cerca del doble del salario mínimo mensual nacional. “El inicio de esta campaña de vacunación representa una oportunidad para proteger a nuestras niñas de la lacra de los cánceres de cérvix durante muchos años”, remachaba el ministro de Sanidad en la presentación del lanzamiento.
Eduardo Celades Blanco, responsable de salud de Unicef Nigeria, señala que esta campaña supone un acontecimiento histórico. “Apoyamos plenamente esta iniciativa y hemos llevado más de seis millones de dosis a diferentes Estados del país”. Añade que Unicef también ha prestado apoyo logístico y distribuido equipos de refrigeración para la conservación de las vacunas. Además, ha formado a más de 35.000 trabajadores sanitarios y establecido puntos de vacunación en los 4.163 distritos de los 16 Estados en los que se implementará la primera fase.
La aparición de información errónea sobre la vacuna es una amenaza para el éxito de los programas de inmunización en el país. Proliferan las afirmaciones falsas de que la vacuna contra el VPH es insegura, ineficaz y causa infertilidad, lo que desencadena que algunos padres de comunidades rurales no vacunen a sus hijas.
“Hay mucha desinformación sobre la vacuna entre la opinión pública, pero la hemos introducido en más de 100 países, aparte de Nigeria. Por eso estamos trabajando con líderes comunitarios y religiosos para informar a la gente sobre las ventajas de la inoculación. El Gobierno también se ha hecho eco de la campaña”, afirma Celades, de Unicef. El organismo ha producido materiales informativos en radio y televisión en varios idiomas locales “para disipar la información errónea y los rumores”. Además, apoyó un grupo de investigadores a realizar dos rondas de evaluaciones de preparación “para comprender los sentimientos de la población sobre el virus del VPH y la vacuna”, informa en un comunicado.
Subomi Olatunji, ginecóloga del Hospital Universitario Obafemi Awolowo de Ile-Ife, en el Estado de Osun, explica que no existe ninguna relación entre la vacuna contra el VPH y la infertilidad femenina. Y señala que prevenir la infección por este virus es la mejor manera de combatir el cáncer de cuello de útero, ya que Nigeria tiene una capacidad limitada para tratar la enfermedad. “Lo que tiene que hacer el Gobierno es asegurarse de llevar a cabo campañas de sensibilización y concienciación sobre la importancia de la vacuna a través de los líderes comunitarios y religiosos de las comunidades rurales”, considera.
“Si no se trata debidamente, el cáncer de cuello de útero puede provocar
la obstrucción de las trompas de Falopio o hacer que aparezcan quistes
ováricos, de ahí la necesidad de vacunar a las niñas a una edad
temprana, antes de que empiecen a tener relaciones sexuales. Los medios
de comunicación también tienen una función que desempeñar a la hora de
garantizar que las informaciones sanitarias estén debidamente
verificadas para orientar la percepción pública en la dirección
correcta”, concluye la ginecóloga. (Fuente: El País. Planeta Futuro. 7 de noviembre de 2023).
No hay comentarios:
Publicar un comentario