El contenido de este blog se ha cedido al dominio público: puede ser copiado, parcial o totalmente, sin previo permiso de la autora.


jueves, 10 de enero de 2013

Privatización de los servicios de sanidad. Un ejemplo

     La tendencia es a un modelo de sistema de salud como el de Estados Unidos, dominado por organizaciones con fines de lucro, en el cual los hospitales se manejan cada vez más como negocios.

     Es incomprensible que, en una época de austeridad presupuestaria, se imite a Estados Unidos, un país que tiene el sistema de salud administrativamente más caro del mundo, a pesar de que solo cubre un porcentaje muy bajo de la población. Luis Rojas Marcos, psiquiatra y comisario de los Servicios de Salud Mental de Nueva York, dice: "A pesar de que la asistencia sanitaria consume el 19 % del producto nacional bruto, 31 millones de estadounidenses carecen de seguro de enfermedad, y uno de cada cuatro, o 63 millones de ciudadanos, perderán su seguro antes de finalizar 1995. (El artículo fue publicado en noviembre de 1993)

     En Estados Unidos, en la década de los años ochenta, la cobertura sanitaria pasó de ser contemplada como un derecho de la ciudadanía a ser un bien que debería ser regulado por la ley de la oferta y demanda. "Entonces, el sector más conservador del Gobierno y la sociedad convenció al país de que las condiciones del libre comercio podrían reducir los precios y aumentar la satisfacción del consumidor", explica James Morone, profesor de Ciencia Política en la Universidad Brown y autor del libro Política de Reforma Sanitaria.

     "Entonces, la izquierda decidió negociar algo que hasta la fecha no había sido negociable. Aceptó considerar la sanidad como un bien de mercado siempre y cuando hubiera unas excepciones, como que el Estado pagara las facturas de aquellos que no se lo pudieran permitir". Así es como nacieron dos grandes programas, Medicare y Medicaid, que hacen que el gasto público siendo el más caro del mundo, en realidad, no cubra a todos los ciudadanos.  Es lo que sucedió a un niño que murió por un simple dolor de muelas, porque era uno de los millones de ciudadanos que no tienen seguro de enfermedad y no fue atendido en Medicaid. (Véase http://elpais.com/diario/2009/03/09/sociedad)

     ¿Se puede decir que Estados Unidos es un país desarrollado? Según el diccionario de la RAE, sin duda, NO.

     La expectativa de vida de los hombres y mujeres de Kerala (calificado por Occidente como país subdesarrollado) es mayor que la de la población afroamericana de Estados Unidos, debido a que el gobierno de Kerala se ha preocupado más de la calidad de vida de sus ciudadanos que del crecimiento económico.  Por mucho que duela a Occidente, en estos momentos Kerala es un país con un grado de desarrollo mayor que el de Estados Unidos.

     Abolida la esclavitud, condenada la pena de muerte, prohibido el trabajo infantil,... ¿es aceptable, es humano, que en la búsqueda de un mayor crecimiento económico se condene a muerte a un hombre, uno mujer, un niño o una niña?

5 comentarios:

Anónimo dijo...

La insumisión es una figura legal que sólo se admitía en relación al servicio militar, cuando existía, ahora no se regula en ningún texto, pero vista la actuación de los corruptos gobernantes que tenemos: ¡Insumisión, ya!...A todos los niveles: sanidad, fiscal, no pagar hipotecas...etc.
Saludos. Buen post.

J. Felipe dijo...

En lo humano, poco más que añadir. En lo divino, en Valencia fue una empresa en la que participaban conocidos políticos los que se quedaron la contrata para la gestión de un hospital público. Al cabo del tiempo le devolvieron esta, por baja rentabilidad, al gobierno valenciano por lo que percibió 90 millones de eruos de indemnización. Ahora ha vuelto a salir a subasta y ¿podéis iamginaros quien ha sido nuevamente la adjudicataria?

En Madrid, un antiguo alto cargo del gobierno de la Comunidad que durante su mandato abogó casi con vehemencia por la privatización de la sanidad va a quedarse ahora con la gestión de algún que otro centro sanitario. Y para colmo es el marido de nuestra querida Andreita Fabra. ¿Os acordáis? La hija de Carlos Fabra y la del "que se jodan" los parados. Casualmente, mira por donde también, portavoz de sanidad en su grupo parlamentario. ¿Hay quien dé más?

Un saludo.

Juliana Luisa dijo...

Existe una fuerte unión entre el sistema económico del que estamos hablando y la corrupción, debido, a mi juicio, al individualismo que le caracteriza y la consideración del ser humano como simple "máquina de calcular". Ello conduce a la ley de la selva. Por todos los seres humanos, hombres, mujeres, niños y niñas a los que el sistema sacrifica, estamos obligados a hacer algo, sea lo que sea.

Gracia a Inma por alentar a la insumisión o desabediencia civil.

Sin tantos detalles, como señala J. Felipe algo sabía de lo acaecido en Valencia. Eso de la austeridad y déficit presupuestarios se han convertido en un engaño para bobos. ¿Cómo se podría hacer llegar a Rajoy esos datos y decirle que no somos "bobos"?

Muchas gracias a los dos por vuestras aportaciones.

Óscar Gartei dijo...

¿En qué cabeza cabe que la sanidad es un bien de mercado? En la cabeza de una persona a la que no le importan otras personas. Pero este es un asunto que ya has tratado en otras ocasiones, poniendo en tela de juicio el PIB y lo que supone. Mayor crecimiento económico no implica necesariamente mejor calidad de vida. En todo caso, suele ser lo contrario.

Juliana Luisa dijo...

Tienes razón en todo lo que dices. Es el vigente sistema económico el que hay que modificar: la Organización Mundial de Comercio, que ha convertido todas las actividades humanas en mercancia, el FMI (inseparable del Banco Mundial) que decreta que los descalabros del sector financiero corran a cargo del dinero de los ciudadanos, mediante estrictos planes de austeridad, a pesar de los fracasos vivimos en la mayor parte del Tercer Mundo. Ahora parece que empieza a darse cuenta, pero no me fío.
Y dada la naturaleza de esas instituciones, la única forma es cambiando las democracias representativas, porque quienes por ahora nos representan, no piensan n sus representados, sino solo en tener contentos a los mercados: sector financiero, de servicios, de mercancías...

Perdona que me haya extendido tanto. Pero es indignante lo que están haciendo, son delitos contra la humanidad.

Gracias por estar ahí. Un saludo