El Parlamento Europeo ( órgano legislativo de elección directa de la Unión Europea). y el Consejo los Estados miembros) llegaron ayer (20 de febrero) a un acuerdo provisional -a ratificar aún por las dos partes- para la creación del primer marco de certificación voluntaria - a nivel de la UE para la eliminación de carbono. Con esta medida. Bruselas espera impulsar las tecnologías innovadoras de absorción de este gas que considera clave para los nuevos objetivos intermedios de 2040 antes de alcanzarla neutralidad climática a mediados de siglo.
La iniciativa también busca alentar la captura de carbono en suelos agrícolas, para lo cual prevé recompensar a aquellos agricultores que realicen practicas que conduzcan a una mejora general del equilibro de carbono en el suelo.
El Consejo destacó que, una ves entre el vigor, este reglamento será el primer paso hacia la introducción de un marco integral de eliminación de carbono y reducción de emisiones del suelo, en la legislación europea.
El pacto se conoce poco después de que el comisario de Acción Climática, Wopke Hoekstra, propusiera, en nombre de la Comisión y a comienzo de mes, el objetivo de 90% de reducción de gases de efecto invernadero para 2040. Una meta que requerirá, según Bruselas. de un impulso decisivo de las técnicas y captura y almacenamiento de carbono, sistemas para atrapar dióxido de carbono generado y enterrarlo en el subsuelo, o de absorberlo con sumideros naturales (como bosques).
El marco ofrecerá nuevas "oportunidades económicas para que los agricultores, silvicultores, constructores e innovadores", destacó Hoekstra, en momentos en que las agrícolas han hecho recular parte de la ambiciosa política medioambiental de Comisión Europea.(...)
Los agricultores, eliminadores de carbono, "puedan ser recompensados sobre la base de las absorciones y reducciones de emisiones certificadas". Para ello, establece normas de certificación para la captura es suelos agrícolas, como la certificación para la captura en suelos agrícolas, como la restauración de bosques. Además, la reducción de la liberación de metano procedente de la digestión de las vacas o la gestión del estiércol del ganado se incluirá como parte de la revisión de la normativa prevista en 2026. (...) (Fuente: El País, 21 de febrero de 2024:
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