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miércoles, 20 de marzo de 2024

Migrantes trabajadores en España

      Cerca de 8.000 migrantes, muchos de ellos en situación irregular, viven todo el año en asentamientos chabolistas en Almería y Huelva en unas condiciones infrahumanas e indignas de un país que figura entre los más ricos de Europa. La cifra es solo aproximadas y provienen de los cálculos de las organizaciones no gubernamentales (ONG), y que no existe censo oficial. Son los trabajadores que han contribuido con su labor en los invernaderos de plástico a un pujante sector hortofrutícola que factura entre ambos territorios alrededor de  5.000 millones de euros, en trabajo en el que abundan salarios muy pequeños, jornadas eternas, malas condiciones de salubridad y otras importantes violaciones de derechos humanos básicos, como denunció hace un año la ONG británica Ethical Consumer.

     Verse obligado a vivir en esas  condiciones de exclusión y con carencias básicas resulta intolerable en España del siglo XXI, pero aún lo es más cuando esta situación se viene arrastrando desde hace casi 25 años con plena conciencia de las administraciones implicadas, que llevan demasiado tiempo pasándose el problema sin terminar de abordar políticas eficaces."Viven como animales", denunció el relator especial sobre la extrema pobreza de la ONU, Philip Alston, cuando visitó en febrero de 2020 un asentamiento de temporeros inmigrantes el Lepe (Huelva). La situación no ha mejorado sustancialmente desde entonces. Las condiciones de estos poblados de infraviviendas ha sido también criticadas por el Grupo de Expertos el Acción contra la Trata de Seres Humanos dependiente del Consejo de Europa y analizadas por la Eurocámara.

     La sociedad española no debe resignarse a que esta vulneración de derechos humanos básicos formen parte del paisaje, (Fuente: El País, 19 de marzo de este año)

     El Objetivo de Desarrollo Sostenible 8 es "promover el crecimiento económico inclusivo y sostenido, el pleno empleo productivo y el trabajo decente para todos"

     El trabajo decente es algo que figura, de una manera u otra, en varias metas a alcanzar, como más tarde, el año 2030. Muy importante, en este caso, es la meta  8.8 "Proteger los derechos laborales y promover un entorno de trabajo seguro y sin riesgos para todos los trabajadores, incluidos los trabajadores migrantes, en particular las mujeres migrantes y las personas con empleos precarios".

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