La empatía es la característica que tiene una persona para ponerse en lugar de otra. Es decir, ser capaz entender su situación. En estos momentos, necesitamos tener empatía, es decir, ponernos en lugar de las persona, los niños y niñas de los países que están en guerra,
Jeremy Rifkin, autor de numerosos best-sellers, analiza en su libro La civilización empática. La carrera hacia una conciencia global en un mundo en crisis (2010, Paidós), la evolución de la empatía, una capacidad que ha ejercido una poderosa influencia en nuestro desarrollo y que, probablemente, determinará nuestro futuro como especie.
Múltiple experimentos sobre en el ámbito de las neurociencias y en el desarrollo infantil desarrollo infantil han puesto de manifiesto que el ser humano, junto con otras especies animales, está dotado de empatía, Todos esos recientes estudios, según Rifkin, "nos obligan a cuestionar la creencia, tan arraigada, según la cual los seres humanos son agresivos, materialistas y egoístas, por naturaleza. Ahora, al contrario, empezamos a darnos cuenta de que somos una especie fundamentalmente empática, y ello tiene unas implicaciones profundas y de largo alcance para la sociedad".
La diferencia entre el ser humano y otras especies animales es que el ser humano está dotado de inteligencia, inteligencia operativa..
Rifkin nos invita a reflexionar sobre la que podría ser la pregunta más importante que la humanidad pueda plantearse, sobre todo, en estos momentos: ¿Estamos a tiempo a tiempo de alcanzar la empatía global necesaria para evitar el desmoronamiento de la civilización y salvar la Tierra?
Todo esta de acuerdo con la necesidad de tener conciencia de especie: inteligente y empática. Un niño preguntó a su abuela: ¿Para qué vivimos?" La abuela contestó: "Para disfrutar de la vida colaborando en la construcción de un mundo mejor". Un mundo mejor, en este momento, es un mundo en el que el gasto en fabricar armas sea para dar comida, educación, proporcionar servicios de salud... a los que los que los necesitan. Además,de cuidar el planeta Tierra en que vivimos.
Termino esta "píldora para pensar" con el siguiente texto, atribuido a Einstein: "Es la crisis donde nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. La creatividad nace de la angustia, como el día de la boche oscura. La crisis esla mejor bendición que puede sucederles a las personas y a los países porque la crisis trae progresos. El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar salidas y soluciones. En vez de eso trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora que es la tragedia de no querer superarla".
No a las guerras: ¿conseguiremos que nos hagan caso? Me gustaría conocer vuestra opinión.
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